CAPUCCINO DE ZANAHORIA, NARANJA Y YOGUR

 Preparar una gran comida para nuestros invitados implica pensar en los aperitivos o entrantes. Estos bocados iniciales de la comida necesitan ser deliciosos, atractivos y sobre todo deben de ser sorprendentes, no nos podemos quedar en un plato de aceitunas o una bolsa de patatas. Eso si, necesitamos que sean fáciles de preparar, o que podamos prepararlos con antelación, conservarlos y presentarlos en el momento justo con todas sus cualidades. 

Normalmente estos aperitivos suelen ser sólidos, unos pinchos, unas tapas o unos canapés es lo habitual. Pero existen otras alternativas como pueden ser los vasitos rellenados con cremas, frías o calientes, según la época, que nos van a dar ese plus de sorpresa que siempre necesitamos. Este es el caso de este aperitivo.

Una combinación de hortalizas, frutas y lácteos que aparte de esta utilización que propongo aquí nos podría servir muy bien, con las convenientes adaptaciones, como un desayuno o un postre estupendo.

He de decir que durante su elaboración tuve mis dudas sobre el resultado final pero una vez acabado me encantó. Un sabor suave, muy agradable, con un final residual potente pero delicioso que nos deja en la boca. 

No dudéis en probar esta opción como aperitivo porque os va a encantar.