Es una satisfacción poder realizar una receta muy rica con unos pocos ingredientes sencillos. Solo vamos a utilizar una pechuga de pollo y unas patatas y vamos a realizar una salsa que podemos preparar a nuestro gusto sin apenas darnos cuenta.
Vamos a elaborar las patatas hirviéndolas en primer lugar y luego las vamos a freír. Conseguimos así unas patatas crujientes por fuera y muy blandas por dentro con lo que nos va a dar una textura muy agradable.
La salsa la vamos a realizar con productos pre elaborados, mayonesa, tomate frito y tabasco y vamos a regular nosotros mismos el grado de picante que más nos guste. Podríamos realizar una salsa brava en toda regla pero esta da un resultado muy parecido y nos ahorra un poco de trabajo.
Respecto al pollo simplemente lo vamos a dorar con un poquito de aceite en una sartén.
Acompañaremos todo con una guarnición de un mezclum de lechugas, o rúcula, o canónigos.
Así de fácil, sin complicaciones y con un resultado bastante interesante.
ALERGENOS:
0 comentarios:
Publicar un comentario