Quería preparar esta semana una receta que no me llevara mucho tiempo y que no tuviese ingredientes demasiado costosos y que fueran fáciles de encontrar. Pero si que me interesaba que fuese agradable y sobre todo muy sabrosa.
Quería preparar una tapa o una ensalada como inicio de una comida que presumía iba a ser copiosa pues estábamos de celebración en casa.
Buscando encontré una ensalada que me llamó la atención porque prácticamente lo tenía todo a mano y no iba a suponer una elaboración complicada.
La base del éxito de una ensalada radica casi siempre en el aliño con el que la podamos acompañar y este que os mostraré, una combinación muy habitual, ha resultado muy acertado para los ingredientes utilizados.
Espero que os guste.
Ingredientes (4 raciones):
100 gr. de espinacas baby frescas, 150 gr. de panceta, 200 gr. de setas variadas troceadas y 2 cucharadas de aceite de oliva.
Para el aliño: 5 cucharadas de aceite de oliva, 1 cucharada de vinagre balsámico, 1 cucharada de mostaza antigua, 1 pizca de azúcar, 1 pizca de sal y una pizca de pimienta negra molida.
Preparación:
Lavamos y secamos bien las espinacas. En el mercado podemos encontrar productos llamados de 4ª gama que son vegetales lavados y conservados en una atmosfera especial que se pueden consumir directamente.
Cortamos la panceta en dados pequeños.
Hemos comprado ya unas setas que están troceadas por lo que no tenemos que realizar ninguna manipulación.
Elaboración:
Colocamos las espinacas en una ensaladera grande.
Preparamos el aliño echando en un recipiente que se pueda tapar todos los ingredientes, el aceite, el vinagre balsámico, la mostaza, y la sal, el azúcar y la pimienta. Cerramos el recipiente y agitamos enérgicamente para que se mezcle todo.
En un sartén echamos 2 cucharadas de aceite y salteamos la panceta durante unos 3 minutos.
A continuación agregamos las setas y seguimos salteando durante 3 o 4 minutos más hasta que estén tiernas.
Por último vertemos el aliño en la sartén, mezclamos bien y pasamos el contenido de la sartén inmediatamente a la ensaladera donde tenemos las espinacas.
Mezclamos todo bien con la ayuda de unas cucharas o agitamos el recipiente para que la salsa se reparta uniformemente.
Presentación:
Servimos inmediatamente, es una ensalada templada, bien al centro de la mesa o repartiéndola en platos individuales.
Listo.
ALERGENOS: SULFITOS, MOSTAZA
Podemos perdonar fácilmente a un niño que tiene miedo de la oscuridad; la verdadera tragedia de la vida es cuando los hombres tienen miedo de la luz (Platón)
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